Emprendedores sin red
La diferencia entre un emprendedor y alguien que no lo es radica en su actitud ante la vida, principalmente ante la adversidad. No hay nada en este mundo que merezca la pena y se consiga sin sufrimiento.
La diferencia entre un emprendedor y alguien que no lo es radica en su actitud ante la vida, principalmente ante la adversidad. No hay nada en este mundo que merezca la pena y se consiga sin sufrimiento.
El cerebro humano está preparado para sobrevivir, si no se considera amenazado se acomoda, si no le ofreces objetivos se relaja, sin metas te anquilosas de tal manera que el obstáculo más ridículo se presenta insalvable. En tus manos, y en tu mente, está conseguir/buscar/plantear esos objetivos para mantenerte vivo.
Si tuviera que definir a Sergio Fernández después de haberle escuchado durante 4 horas, diría que es un «empujador profesional a la acción» apto para emprendedores. No te cuenta nada nuevo, o sí. Quizá hayas escuchado en repetidas ocasiones el mismo discurso, pero su grado de compromiso es tan alto y sus objetivos están tan claros que consigue contagiarte «su enfermedad», e incluso es capaz de venderte un libro dentro de una ermita.
Si estás en el equipo de los 10 no te preocupes. Todo vendrá rodado, tan sólo has de mantener el ritmo. Si por contra estás en el equipo de los 5, ¡enhorabuena! Las sensaciones que vivirás en combate no las compra el dinero. El camino es la recompensa. Disfruta.